PRIMAVERA EN PIÑERA
Venimos de lluvia,
de nieve y de viento.
Salimos de niebla,
penumbra y silencio,
de noches eternas
y crudos inviernos.
Ya nacen las flores,
despiertan de nuevo.
Carmina, Milagros,
Pacita, Consuelo...
azada en el hombro,
caminan al huerto,
y siembran patatas,
cebollas y puerros
y empapan la tierra
de espera y esfuerzo.
Trotando caminos,
abriendo senderos,
pasean, tranquilos,
Pedro y sus perros,
rozando su frente
el beso del viento.
Cantan los mirlos,
se oyen "cencerros"
de vacas de Herminio,
de Jorge y Roberto...
que pastan tranquilas
al lado del pueblo.
Sonrisas de niños,
ladridos de perros;
se miran, se besan
y, cómplices ellos,
esparcen ternura,
dibujan modelos
a nuestros mayores
de un mundo nuevo.
Piñera despierta.
Ramona, Alfredo...
nos abren la escuela
y sirven refrescos,
animan tertulias,
promueven festejos...
Y todo es gracia
y todo desvelos
que siembran la paz
y alegría en el pueblo.
¡ que poderio ! Entrañable, precioso; lástima que no se lo hayas mandado a tu padrino en aquel hitórico desafio que os hizo; algún días de estos lo publicaré.
ResponderEliminarReitero mi FELICITACIONES y, por favor, no nos hagas esperar tanto tiempo para disfrutar de tu sapiencia.
Un fuerte abrazo